Si eres traductor autónomo, que entonces es probable que trabajes desde casa, queremos darte una serie de consejos para trabajar desde tu propio hogar sin que te vuelvas loco y para que rentabilices el tiempo al máximo.
Horarios
Márcate unos horarios y, sobre todo, cúmplelos. A veces es complicado porque no tienes una rutina fija o un jefe que te obligue a rendir desde una determinada hora. Pero debes pensar que si tu trabajo es tu propia empresa, entonces también será tu dinero. Así que, procura no remolonear demasiado en la cama y no escaquearte del trabajo antes de tiempo.
Distingue espacios
Es muy importante diferenciar una zona para trabajar, que puede ser un sala o un despacho independiente. Hay que distinguir entre ocio de negocio, porque de lo contrario corres el peligro de trabajar tumbado en el sofá mientras ves la tele.
Inversión
Puesto que vas a estar mucho tiempo trabajando, te recomendamos invertir en salud. Seguramente te interese comprarte una silla ergonómica para la espalda o un monitor auxiliar para los ojos.
Premios
Date algún premio a modo de motivación personal cuando hagas algo bien o termines una parte de trabajo, así escaparás de la monotonía. Esos premios pueden ser desde un café o una tableta de chocolate, hasta unas entradas para el cine o un capricho durante el fin de semana. Lo importante es que sepas adjudicarlos con cabeza.
Distracciones
Las redes sociales, el correo electrónico personal, el WhatsApp… son distracciones que te impedirán trabajar de manera constante, por lo que te recomendamos no utilizarlos hasta que hayas terminado de trabajar o cuando decidas hacer una pausa. A veces, retomar la concentración es muy difícil.
Sociabilidad
Si te pasas 12 horas al día delante de un ordenador, necesitarás que te dé un poco el aire. Al final de la jornada laboral, coge el teléfono y llama a tus amigos para salir a dar una vuelta o distraerte en una terraza. Pero si cada tarde después de trabajar te encuentras muy cansado y no te apetece, quizá te convenga apuntarte a alguna actividad para obligarte a salir de casa: academia de idiomas, equipo de fútbol, curso de ganchillo…
Muy buenos consejos para traductores… Me encantó la entrada y me encanta el blog.
Saludos,
Leidy